¿Cómo comprar tu casa ideal?

Consideraciones antes de comprar una vivienda

Según expertos en hipotecas al 100% e hipotecas para funcionarios, los errores más comunes que la gente puede cometer al comprar una casa es comprar una propiedad que es insuficiente o demasiado grande en relación con tus necesidades.

Algunos ejemplos:

• Pareja joven que compra un apartamento de dos habitaciones y dos años después decide tener hijos;
• Persona soltera que encuentra pareja después de unos años y tiene una casa demasiado pequeña;
• Una familia con hijos adultos que compra una casa enorme sólo para encontrar las habitaciones vacías y ocupadas por sus hijos en navidad y agosto.

Todas estas son situaciones que nos resultan familiares, ¿no crees?

Precisamente porque la compra de una casa es algo permanente, debe ser rentable a largo plazo.

Si, por ejemplo, estás a punto de casarte y quieres tener hijos a medio plazo, puedes quedarte fácilmente en un piso de alquiler, más grande, y quizás comprar uno adecuado para la familia que quieres formar cuando estés a punto de pasar a la acción.

Haciendo esto, por lo menos, el valor de la transacción se repartirá en al menos 20-25 años hasta que los niños crezcan y abandonen la casa familiar.

Al mismo tiempo, si buscas una casa para vivir con tu cónyuge a partir de los 50 años, es mejor que te decantes por un piso pequeño, ya que es poco probable que tu familia crezca y puede resultar antieconómico tener demasiadas habitaciones para utilizarlas quizás esporádicamente.

¿Cómo elegir un área funcional para tus necesidades?

Hay que tener en cuenta las características fundamentales de las posibles zonas en las que deseas comprar una vivienda.

Una vez hechas esas valoraciones, hay que tener en cuenta otras cuestiones:

• ¿Dónde trabajas? ¿Tienes que viajar mucho para ir al trabajo? ¿Piensas quedarte donde estás ahora unos años más o estás pensando en cambiar? Una hora de viaje en coche o en tren todos los días no es una buena sensación y es un tiempo perdido que se echará de menos con el paso de los años;
• ¿Dónde van tus hijos a la escuela? Si vives en una población pequeña es muy probable que tus hijos puedan ir a la escuela andando, pero si vives en una gran ciudad, sabes que no será posible que sea así. Asegúrate de elegir una zona que esté bien comunicada también en este sentido;
• Metro, autobús, tren: ¿a qué distancia están las paradas? Deshacerse del coche es una buena manera de reducir los gastos innecesarios. Elige una zona que te ofrezca esta posibilidad: de este modo, mantendrás el coche por placer y no por obligación.

Estas son otras valoraciones importantes a realizar y que recomendamos tener en cuenta a la hora de valorar dónde se va a comprar la vivienda.

La comunidad: valoraciones importantes a realizar

Si eliges un piso en un bloque de viviendas, debes prepararte mentalmente para años de peleas, preguntas y discusiones con los demás. Al fin y al cabo, no se puede estar siempre de acuerdo con las ideas de todo el mundo.

No hay ningún edificio de viviendas en este planeta en el que esto no ocurra.

Como tendrás que convivir con otras personas, asegúrate de elegir un edificio con gente que te facilite las cosas. Algunos consejos importantes son los siguientes:

• Cuando visites el piso, fíjate en el interfono: si hay despachos de profesionales, por ejemplo, puede ser una señal positiva. Sin embargo, ten cuidado, porque si hay médicos u otros consultorios abiertos al público, esto podría traer mucha gente al edificio, lo cual, además de ser molesto y potencialmente crear problemas, podría acelerar el proceso de deterioro del edificio y obligar a la comunidad a gastar más;
• Llame al administrador de la comunidad y pregunta si todos están al día con sus pagos: si hay personas que no pueden pagar sus gastos de comunidad, en el peor de los casos usted pagará más. También es posible que se produzca un rápido cambio de inquilinos, ya que los que no pagan se verán obligados a vender tarde o temprano, y es posible que lleguen personas no deseadas. Una comunidad en el que todos pagan es siempre ideal;
• Fíjate bien en el estado del edificio: si tiene mal aspecto, es porque no está habitado por personas con las que sea agradable convivir. Al administrador le interesa presionar para que se hagan las obras (y en ciertos casos, cuando hay riesgos de seguridad, está obligado a hacerlo por ley), pero si no se hacen estas obras, pueden darse los siguientes escenarios:

1. Los propietarios del edificio no están en una buena situación financiera y no tienen dinero para pagar las obras;
2. El edificio está situado en un barrio decadente y todo el mundo quiere deshacerse de sus casas, cuyo valor se ha depreciado;
3. Puede haber personas en el edificio que hayan ocupado un piso o haya situaciones de fuerte malestar social;
4. Los propietarios están lejos, son segundas residencias que les importan poco, hay una transición porque a lo mejor hay disputas por herencias y cosas similares.
5. Hay una transición en curso porque tal vez hay disputas por la herencia y cosas por el estilo.

Son varias situaciones, investiga y trata de entender: es obvio que un inmueble en una zona céntrica y bien mantenida no tendrá dificultades para poblarse de nuevo en poco tiempo mientras que un inmueble en una zona ya decadente es más probable que se deteriore si, además de las condiciones externas, las internas también son malas.